Tres poemas de Ricardo Olave

Ricardo Olave Montecinos nació en Temuco en 1997. Es poeta y periodista. Ha publicado el libro de poesía Enclaustro (Editorial Tortuga Samurái, 2022).

Sueños de última semana de enero

Sueño con frascos de conservas

Y amigos que mueren por sobredosis

Calor

Resaca

Y un sueño

Parecido a la agonía

Del oasis que se seca.

Día sudado. En el metro,

dolor de espalda.

Dedos, enredos con posibles cariños.

Saltar por la ventana, para ser

Mutilado de esta forma.

El calor impregnado 

en el asiento de la locomoción

Recuerda al asfalto, mi grito, 

agudo en la caverna, recuerdo.

Que solo esto, 

Como si fuera poco,

Es la vida que tenemos.

Ojos escamosos, cuerpo anulado

Bajo el peso de una pastilla.

Desde el aire, la ciudad grita

Sin saber quién escucha sus males.

Y ya no soy miedo o una masa con dolores

Solo un insomnio mal tratado

Buscando la trampa 

Entre palabras rebuscadas

Al despertar cada mañana.

Trizado

Mil gritos entre los muros

Soy solo ruido. Pierdo rumbo u horizonte

Es desgarro: algunos aturdidos pertenecen a la noche

Quisiera ver el reflejo desde ese vaso trizado

Pequeñas esquirlas atraen mi sangre

Deletreo el ritmo de mi pérdida

Hablamos el mismo idioma

Y aún sigo perdido

Alguien acérquese, divise la baranda

El audio del siglo parece estar desconectado

Aún no descubre tierra firme

Tierra que duerme, esperando una respuesta

Besos desalmados al partir

Confieso esta noche de domingo 

A los avatares de la realidad 

Que manejan el mundo 

Serán solo eso 

Un simple reflejo 

En esta pieza somnolienta

Así, en el país que inventaremos 

Ya no será obligatorio saludar 

Nos tendremos que encontrar 

Siempre mirándonos a los ojos 

Para que cada acto de comunicación 

Sea verdadero

Nos buscaremos aunque sea un crimen

Si tuviera que estar preso 

Por un delito que no recuerdo 

Ni he cometido 

Ni cuatro murallas me detendrían 

Aún tendría el cielo

Pensando así, la regla será simple 

Dejaremos de ordenar la semana

Como siempre nos han dicho

El domingo podría estar un miércoles 

Y los jueves pasar al lunes 

¿Y los lunes? Los lunes podríamos discutirlos

Tengo el día de semana

Tienes tú para elegir 

Hablan claro las entrañas 

Saben dónde dirigir 

Verdadero es lo que crees

Verdadero es lo que dices